Buenas tardes a todos.
En mi caso he sido un rebelde solitario gran parte de mi vida, he caminado la vida con desparpajo, capeado tormentas y dormido bajo la luz de la luna. Y puedo arriesgarme a decir (por lo menos en lo que a mí persona atañe) que después de un medio siglo de vida en aprendido a medir el apego (condicionante si los hay) con que tomo cada cosa, valorando lo que hace mi camino más claro, y me aleja de aquello que embarra mis pies. Una breve sesión de terapia, iluminó mi alma como un farol, y así, casi sin querer, se fue cayendo a pedazos el sobretodo que me tenía amarrado a las cosas vanas. Hoy, puedo decir que decido lo que quiero, y como lo quiero. Dedico mi día a ciertas obligaciones, mas me tomo tiempo para sentarme y escuchar a otras personas, acompañarlas, mimando sus almas y reconfortando la mía. La vida es hermosa, espero que Uds. puedan disfrutarla con la misma intensidad con que lo hago Yo.
Saludos cordiales!