16/09/2019 a las 18:08
#5536
Invitado
Delicado asunto ese del control o supresión de los deseos, entendiendo que todos ellos provienen de la mente, específicamente del ego que se alimenta de la auto-complacencia. Incluso me pregunté si participar en este foro o debate no era también un deseo del ego de mostrar conocimiento, tener la razón, querer exhibirla… La supresión de los deseos, incluso el de liberarse, debe ser tan radical que el despertar de la consciencia signifique la muerte del ser irreal y el nacimiento del real. Jesús lo expresó perfecto cuando dijo: «Niégate a ti mismo, toma tu cruz y sígueme».